El pan de sus labios vale mis dos manos.
Un amante enamorado muere de hambre cada día.
Mientras te acercas al cerco electrificado, mira a tu alrededor, reconoce esas facciones, luego grabalas; los surcos en la vida rasgan como papel de amor y los sentimientos que nos cuidan, pintados, tienen calma.
Persigo la supervivencia, necesito el aire, quiero estar aquí.
Ansioso.
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