17 de julio de 2010

Oda al 17 de Julio de 2010

Temprano empezando la algarabia, se despiertan y se acuestan los animales, casi todos animados por un nuevo ejemplo de interaccion, donde las cuentas son dispares y rara vez estoy en este lugar.

La jornada esta vez comenzó antes del alba y en honor de compartir los gametos que nos ofrece la madre, esta vez ha sido suficiente, en otra oportunidad lamento, quizás el tubo nos tranquilice.

Ahora con calor y con todo que hacer me dispongo a esperar en vuelos, mientras la tierra se seca y yo aquí piso el freno, su olor me recuerda y el espacio la extraña, después de la oscuridad.

Este parece ser un espacio tiempo singular, añoranza y expectativas, el que alumbra bien presente y el peso del mundo, todo singularmente ordenado, muéstrame tu senda dentro del bosque y volveremos a vernos.

Debemos preocuparnos de ser puntuales a la hora de su llegada, el nos avisó.

Estoy esperando el vestido, necesito la energía y las ondas en el espacio para lograr paz en este momento...

¡Apareciste !

Luego todo lo demás...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Mi vestido esta medio sin ondas.
Pero aun pienso que las personas tienen derecho a dormir.
Y que deben ser enormemente puntuales en su llegada o partida o en lo que sea.

Anónimo dijo...

Y el tubo no tranquiliza, duerme, y lo sabes.