13 de octubre de 2009

La tortuga, el avion y la garrafa

Se encontraban conversando en un carrete los fieles amigos de siempre, destacando cuando cada uno asentía, era un momento sensacional, muchos decían que hasta la marmota se reía en estos casos, con la cordillera de fondo se explayaban acerca de política, religión y la vida en general.

De sopezón comenzó a llover, cuando uno primero exclamo:
¡el ultimo en llegar a la posada oscura tendrá que pagar por la bebida!

Seguido de eso comenzaron a correr, el mas lento de ellos viajo calmo pensando:
"en el peor de los casos tendré que invitar a mis amigos, no hay apuro"

Para cuando llego dentro, noto que irremediablemente uno de ellos había muerto en manos del otro y apesar de que se lamentaba, se sintió tranquilo porque aun el podría alcanzarlo.

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